EL ENIGMA DE OTRO MUNDO (1951)

La Cosa

En 1951, cuando el mundo aún se encontraba bajo la sombra de la Guerra Fría y el temor a la amenaza atómica, Hollywood encontró en la ciencia ficción un terreno fértil para plasmar las ansiedades colectivas. Uno de los títulos más influyentes de esta primera gran ola de películas de ciencia ficción fue “El enigma de otro mundo” (The Thing from Another World), estrenado por la RKO.
Oficialmente dirigida por Christian Nyby, aunque con la inconfundible impronta de su productor Howard Hawks, la película se basaba en el relato corto Who Goes There? de John W. Campbell Jr., y se convirtió en uno de los grandes clásicos del género.

La cinta refleja tanto el miedo a lo desconocido como la tensión entre ciencia y militarismo. Con un estilo ágil, diálogos rápidos y un uso inteligente de la sugerencia en lugar de la exposición explícita del monstruo, la película conquistó a la crítica y al público. 


Sinopsis

Un destacamento del ejército estadounidense, liderado por el Capitán Hendry, es enviado a una base científica en el Ártico tras detectarse la caída de un objeto misterioso. En compañía de varios científicos y un periodista, descubren bajo el hielo los restos de una nave extraterrestre y, junto a ella, un ser humanoide congelado.

El cuerpo es trasladado a la base en un bloque de hielo, pero un accidente hace que se derrita. La criatura revive y comienza a atacar a animales de la estación para alimentarse de su sangre. Pronto se revela que el monstruo es una forma de vida vegetal altamente desarrollada, con un sistema biológico basado en la clorofila, pero que necesita sangre para sobrevivir.

La situación divide al grupo: mientras el doctor Carrington desea mantener con vida al ser para estudiarlo, convencido de su superioridad científica, los militares consideran que supone un peligro mortal. La tensión aumenta cuando descubren que la criatura ha intentado crear más ejemplares a partir de semillas.

En el clímax, el grupo tiende una trampa eléctrica en un pasillo de la base y consigue reducir a la criatura mediante una descarga de altísimo voltaje. Al final, el periodista Ned Scott transmite un mensaje de advertencia que se convertiría en legendario:
“¡Manteneos alerta… vigilad el cielo!”


Producción

  • Aunque Christian Nyby aparece como director acreditado, gran parte de la crítica y del propio equipo reconoció que el verdadero responsable creativo fue Howard Hawks. El estilo de los diálogos, el dinamismo coral y la relación entre personajes son rasgos habituales en sus películas.

  • El rodaje se realizó mayoritariamente en los estudios de la RKO, utilizando nieve artificial y decorados cerrados para transmitir claustrofobia. Algunas escenas de exteriores se filmaron en Montana.

  • James Arness, de más de dos metros de altura, fue elegido para encarnar al monstruo. El maquillaje lo transformaba en un ser vegetal, pero Hawks decidió mostrarlo lo menos posible y siempre en penumbra, incrementando la sensación de amenaza.

  • La música de Dimitri Tiomkin aporta una atmósfera inquietante con notas agudas y percusión, reforzando la tensión constante.

  • El guion suavizó la trama del relato original de Campbell, en el que la criatura podía imitar a los humanos. Esa versión se consideró demasiado perturbadora y difícil de representar en 1951.


Curiosidades

  • La actriz Margaret Sheridan, protegida de Hawks, fue presentada como “la nueva gran estrella”, aunque su carrera posterior fue breve.

  • James Arness odiaba el maquillaje y estaba convencido de que su monstruo resultaba ridículo. Paradójicamente, la decisión de no mostrarlo demasiado convirtió al personaje en un icono.

  • La frase final “Keep watching the skies!” trascendió el cine y se convirtió en símbolo de toda una generación fascinada por la ciencia ficción.

  • El guion de Charles Lederer eliminó gran parte de los elementos de terror psicológico del relato de Campbell, optando por un enfoque más cercano al cine de aventuras con tintes de horror.

  • En el rodaje se fomentaba la improvisación de diálogos, logrando un ritmo más natural y realista que contrastaba con la rigidez de otros filmes de ciencia ficción de la época.


Estreno en Estados Unidos y España

En Estados Unidos se estrenó el 7 de abril de 1951, siendo uno de los mayores éxitos de la temporada para RKO. Fue programada en cines principales y, más tarde, en sesiones dobles junto a títulos de terror y aventuras.

En España llegó algunos años más tarde, bajo el título “El enigma de otro mundo”. En ciudades como Barcelona se proyectó en salas emblemáticas, donde tuvo gran acogida entre el público joven. 


Recepción crítica

En Estados Unidos, la crítica aplaudió el suspense, la atmósfera y la habilidad para mantener la tensión sin mostrar demasiado al monstruo. Revistas como Variety o The New York Times destacaron su ritmo trepidante y el realismo de las conversaciones.

No obstante, algunos críticos consideraron que el monstruo resultaba poco impresionante en comparación con lo que sugería el relato. Aun así, el público respondió con entusiasmo, consolidando la película como un éxito comercial.

En España, aunque estrenada más tarde, fue recibida como una curiosidad exótica. La prensa española destacó su “originalidad en el planteamiento” y el tono serio con que trataba la amenaza extraterrestre, alejándose del cine de monstruos más convencional de la época. En reseñas de periódicos como La Vanguardia se subrayaba su condición de “enigma de la ciencia” y el valor de su atmósfera inquietante.


Legado e influencia

  • Es una de las primeras películas que definieron el cine de invasiones extraterrestres en los años 50.

  • Su influencia se percibe en títulos posteriores como La invasión de los ladrones de cuerpos (1956), La guerra de los mundos (1953) o Alien, el octavo pasajero (1979).

  • En 1982, John Carpenter retomó fielmente el relato original en La cosa, intensificando el horror y la paranoia. Curiosamente, Carpenter había homenajeado la versión de 1951 en Halloween (1978), donde los niños ven un fragmento en televisión.

  • En 2011 se estrenó una precuela, también titulada The Thing, que narraba los sucesos ocurridos en la base noruega mencionada en la versión de Carpenter.


Crítica moderna

Hoy en día, El enigma de otro mundo se ve como una obra pionera que abrió camino a toda una corriente de cine fantástico. Aunque sus efectos y su criatura puedan parecer ingenuos frente a la sofisticación posterior, su atmósfera, ritmo y capacidad de sugerencia continúan funcionando.
La revalorización crítica ha sido constante, apareciendo en listas de las mejores películas de ciencia ficción de todos los tiempos. Su comparación con La cosa de Carpenter no la relega, sino que enriquece su condición de clásico que inspiró a un clásico aún mayor.


“El enigma de otro mundo” ocupa un lugar central en la historia del cine fantástico. Fue pionera en presentar un enemigo alienígena como reflejo de los miedos de la Guerra Fría, con un estilo narrativo ágil y unos personajes creíbles que se enfrentan a lo desconocido con miedo, tensión y humor.
Aunque la versión de Carpenter en 1982 llevó el relato a un nivel insuperable de horror psicológico y efectos visuales, la película de 1951 sigue siendo una joya imprescindible, tanto por su valor histórico como por su capacidad para transmitir una atmósfera de inquietud que aún hoy resulta efectiva.

Su mensaje final sigue resonando:
“Manteneos alerta… vigilad el cielo.”


LA PELÍCULA EN IMÁGENES


























Ficha Técnica 

  • Título original: The Thing from Another World

  • Título en España: El enigma de otro mundo

  • Año de estreno: 1951

  • País: Estados Unidos

  • Duración: 87 minutos

  • Productora: Winchester Pictures Corporation / RKO Radio Pictures

  • Director acreditado: Christian Nyby

  • Productores: Howard Hawks, Edward Lasker

  • Guion: Charles Lederer, basado en el relato Who Goes There? (1938) de John W. Campbell Jr.

  • Música: Dimitri Tiomkin

  • Fotografía: Russell Harlan (blanco y negro)

  • Montaje: Roland Gross

  • Dirección artística: Albert S. D’Agostino, Walter E. Keller

  • Decorados: Darrell Silvera

  • Sonido: Richard Van Hessen

  • Efectos especiales: Linwood Dunn (fotográficos), maquillage de Lee Greenway

  • Reparto principal:

    • Kenneth Tobey (Capitán Patrick Hendry)

    • Margaret Sheridan (Nikki Nicholson)

    • Robert Cornthwaite (Dr. Arthur Carrington)

    • Douglas Spencer (Ned Scott, periodista)

    • Dewey Martin (Bob)

    • William Self (Cpl. Barnes)

    • Eduard Franz (Dr. Stern)

    • James Arness (La Cosa)