FRENESÍ (1972)

El último gran grito de Hitchcock

En 1972, a los 73 años, Alfred Hitchcock estrenaba Frenesí (Frenzy), su penúltima película y la última rodada en Inglaterra, su país natal. Tras más de una década trabajando en Hollywood, donde había firmado títulos de culto como Psicosis (1960) o Los pájaros (1963), el director regresaba a Londres para filmar un thriller que lo conectaba con sus orígenes en el cine británico de los años treinta, pero con la crudeza que la década de 1970 permitía en pantalla.

La película se basa en la novela Goodbye Piccadilly, Farewell Leicester Square (1966) de Arthur La Bern, y gira en torno a un asesino serial apodado el “Asesino de la Corbata”, que estrangula a mujeres en el Londres contemporáneo. La historia sigue a Richard Blaney, un ex piloto alcohólico y malhumorado, acusado injustamente de los crímenes, mientras el verdadero asesino resulta ser su amigo Bob Rusk, un comerciante de frutas aparentemente cordial.

Con Frenesí, Hitchcock volvía a los temas que habían marcado su obra: el hombre inocente acusado, el voyeurismo, la sexualidad reprimida y violenta, y la delgada línea entre la normalidad y la monstruosidad. Pero a diferencia de obras anteriores, esta vez el tratamiento fue más gráfico, explícito y brutal. En pleno contexto del cine de los 70, con la violencia y el sexo cada vez más presentes en pantalla, Hitchcock se liberó de las restricciones de la censura clásica para filmar algunas de las escenas más duras de toda su filmografía.

La película fue un éxito de crítica y taquilla, considerada una recuperación de forma tras los tropiezos de Topaz (1969) y Cortina rasgada (1966). Hoy se la reconoce como la última gran obra maestra de Hitchcock, un film oscuro, ácido y despiadado, donde el director muestra sin tapujos la perversidad del deseo y la fragilidad de la inocencia.


Argumento 

Presentación

La película arranca con un plano aéreo del río Támesis, en Londres, mientras un político anuncia orgullosamente la limpieza del río. Segundos después, un cadáver femenino aparece flotando: es la víctima más reciente del “Asesino de la Corbata”. Hitchcock establece así la ironía de su tono: bajo la fachada de normalidad británica, el horror acecha.

Richard Blaney, el falso culpable

Conocemos a Richard Blaney (Jon Finch), un ex piloto resentido, en paro, que pierde su trabajo de camarero y se muestra agresivo con todos. Su carácter difícil, sus borracheras y su relación conflictiva con su ex mujer Brenda lo convierten en sospechoso ideal.

Brenda (Barbara Leigh-Hunt), que dirige una agencia matrimonial, aparece como mujer independiente y autosuficiente. Cuando es brutalmente asesinada, estrangulada con una corbata tras una violación, todas las sospechas recaen sobre Blaney, quien había discutido con ella poco antes.

El verdadero asesino

El espectador, sin embargo, sabe desde muy pronto que el auténtico criminal es Bob Rusk (Barry Foster), un simpático vendedor de frutas del mercado de Covent Garden. Rusk es presentado como hombre jovial, encantador con todos, pero que esconde una sexualidad violenta y compulsiva. Su primera escena de asesinato, filmada con crudeza, lo revela como un depredador sin remordimientos.

La tensión entre víctima y verdugo

Tras la muerte de Brenda, Rusk atrae a otra mujer, Barbara Milligan, amiga de Blaney, y la asesina en una de las secuencias más célebres del film: Hitchcock filma el inicio del ataque dentro del apartamento de Rusk, pero en lugar de mostrar el crimen, hace retroceder la cámara por el pasillo hasta salir a la calle, donde el bullicio de Londres continúa, indiferente al horror. Esta elipsis convierte la violencia en algo más perturbador aún: lo que no se ve pesa más que lo explícito.

El hombre inocente perseguido

Blaney, con un historial de problemas y sin coartada sólida, es detenido, juzgado y condenado. Como en otros clásicos de Hitchcock, el espectador asiste impotente a la caída de un inocente, mientras el verdadero culpable sigue libre.

Clímax

En el tramo final, Blaney escapa de prisión para intentar demostrar su inocencia. Cree encontrar a Rusk in fraganti con otra víctima y acude a su casa, donde se esconde en la cama del asesino. El inspector Oxford llega a la escena casi al mismo tiempo y, en un giro hitchcockiano, descubre el cadáver de una mujer en un saco… pero en este caso, la víctima es realmente de Rusk. La verdad finalmente sale a la luz y Blaney queda exonerado.

El último plano muestra a Rusk atrapado, con su saco macabro, mientras Blaney se libra de la injusticia.


Producción y rodaje

  • El regreso a Inglaterra: Hitchcock llevaba años rodando en Hollywood, pero eligió Londres como escenario para este thriller. Rodó en localizaciones reales de Covent Garden, Piccadilly y alrededores del Támesis, lo que dio al film un aire urbano y contemporáneo.

  • Guion: escrito por Anthony Shaffer, autor de La huella (1970), que aportó ironía negra y diálogo incisivo.

  • Casting: Jon Finch fue elegido tras destacar en Macbeth de Polanski (1971). Barry Foster reemplazó a Michael Caine, quien rechazó el papel de Rusk por considerarlo demasiado desagradable.

  • El rodaje: combinó exteriores realistas con decorados cuidadosamente construidos para las escenas más complejas, como el apartamento de Rusk.

  • La censura: Hitchcock se benefició del relajamiento de la censura tras 1968. Por primera vez pudo mostrar un asesinato sexual con crudeza explícita, algo imposible en los años 50.


Estilo visual y atmósfera

Frenesí mezcla el clasicismo hitchcockiano con el realismo urbano de los 70. La cámara recorre mercados, pubs, oficinas, calles atestadas, mostrando un Londres vivo, pero lleno de sordidez.

El tono oscila entre lo cómico y lo brutal: Hitchcock intercala escenas macabras (el inspector soportando las comidas gourmet de su esposa) con secuencias de violencia insoportable (la muerte de Brenda).

La puesta en escena se caracteriza por:

  • Planos largos y movimientos de cámara fluidos, como en la célebre secuencia del pasillo.

  • Uso de ironía visual, contraponiendo lo público (la ciudad vibrante) y lo privado (el horror en los apartamentos).

  • Realismo sucio: Londres aparece como un lugar de podredumbre moral, en contraste con la limpieza superficial anunciada al inicio.


Personajes y actuaciones

  • Richard Blaney (Jon Finch): protagonista ambiguo, no es un héroe inocente al estilo clásico, sino un hombre antipático, lo que hace su acusación más creíble.

  • Bob Rusk (Barry Foster): uno de los villanos más inquietantes de Hitchcock. Su encanto superficial lo convierte en depredador perfecto.

  • Brenda Blaney (Barbara Leigh-Hunt): víctima cuyo asesinato es filmado con crudeza insólita.

  • Inspector Oxford (Alec McCowen): policía sagaz, pero rodeado de escenas cómicas con su esposa gastrónoma, que alivian la tensión.


Temas y simbolismo

  1. El hombre inocente acusado: un tema recurrente de Hitchcock, aquí en su versión más amarga: el inocente es un hombre desagradable, difícil de defender.

  2. Sexo y violencia: Frenesí aborda de frente la relación entre deseo y muerte, sin metáforas, mostrando la violencia sexual como motor del crimen.

  3. La máscara social: Rusk simboliza la dualidad entre la apariencia amable y la perversión oculta.

  4. El humor negro: la comedia funciona como alivio, pero también como recordatorio de la indiferencia de la sociedad ante el horror.

  5. La ciudad como escenario moral: Londres es retratada como un cuerpo corrupto, donde bajo la superficie respetable late la podredumbre.


Recepción crítica

La película fue aclamada como un regreso a la forma clásica de Hitchcock. Tras los fracasos de Topaz y Cortina rasgada, Frenesí devolvió al maestro a la crítica favorable y al éxito de taquilla.

Algunos críticos se escandalizaron por la crudeza del asesinato de Brenda, considerado excesivamente gráfico. Pero la mayoría reconoció que Hitchcock había sabido adaptarse a la modernidad del cine de los 70 sin perder su estilo personal.

Roger Ebert la definió como “el mejor Hitchcock desde Psicosis”. En Inglaterra, muchos celebraron el regreso del director a escenarios londinenses tras décadas en Hollywood.


Legado e influencia

  • Fue la última gran película de Hitchcock antes de La trama (1976).

  • Anticipó el auge del cine de asesinos seriales y thrillers urbanos de los 70 y 80.

  • Revalorizada hoy como pieza clave de la transición entre el cine clásico y el moderno.

  • Influyó en cineastas como Brian De Palma, que retomaron la mezcla de erotismo, violencia y estilización.

  • La figura de Rusk sigue considerada uno de los villanos más inquietantes del cine británico.


Curiosidades

  • El asesinato de Brenda fue filmado varias veces; la primera versión resultaba tan violenta que Hitchcock la suavizó.

  • Michael Caine rechazó el papel de Rusk, arrepintiéndose después de la repercusión del film.

  • Hitchcock aparece en su cameo entre la multitud del inicio, junto al Támesis.

  • Fue la primera película de Hitchcock clasificada “R” en Estados Unidos, debido a la violencia y el desnudo.

  • Anthony Shaffer, guionista, incorporó humor negro para equilibrar la dureza de la trama.


Conclusión

Frenesí es el último gran rugido de Alfred Hitchcock: un film brutal, ácido y lúcido que actualiza sus obsesiones para una nueva era. Frente a la elegancia metafórica de Psicosis, aquí el crimen aparece desnudo, explícito, imposible de maquillar.

Hitchcock muestra un mundo donde la violencia sexual no es anomalía, sino pulsión latente en la vida cotidiana. Londres, corazón de la civilización, se revela como un espacio podrido donde la corbata, símbolo de respetabilidad, se convierte en instrumento de muerte.

La ironía final es que el verdadero culpable es el hombre simpático que todos aceptan, mientras el inocente es rechazado por antipático. Hitchcock parece advertirnos: no confiéis en las apariencias, porque el mal se esconde en lo familiar, en lo cercano, en lo amable.

Más de medio siglo después, Frenesí sigue siendo incómoda, excesiva y brillante. Una obra crepuscular, pero también una reafirmación de que Hitchcock nunca dejó de mirar la oscuridad del deseo humano de frente. En el Londres de Hitchcock, la corbata no es símbolo de elegancia: es el lazo con que la respetabilidad estrangula a sus víctimas.


LA PELÍCULA EN IMÁGENES

















Ficha técnica

  • Título en español: Frenesí

  • Título original: Frenzy

  • Año de estreno: 1972

  • País: Reino Unido

  • Director: Alfred Hitchcock

  • Guion: Anthony Shaffer, basado en la novela de Arthur La Bern

  • Producción: Alfred Hitchcock

  • Fotografía: Gilbert Taylor

  • Música: Ron Goodwin

  • Duración: 116 min

  • Reparto principal:

    • Jon Finch (Richard Blaney)

    • Barry Foster (Bob Rusk)

    • Barbara Leigh-Hunt (Brenda Blaney)

    • Anna Massey (Babs Milligan)

    • Alec McCowen (Inspector Oxford)